Prepararse para perder peso

Consultar al médico, incorporar la actividad física y una alimentación sana y equilibrada a la vida diaria.

Prepararse para perder peso

Para perder peso es preciso modificar algunos hábitos de vida, entre ellos la alimentación y evitar el sedentarismo. También es preciso asesorarse, hablar con un médico, un profesional, consultar a un nutricionista, y no deslumbrarse con dietas de moda o programas de adelgazamiento milagrosos, que lejos de favorecer lo único que hacen es perjudicar su salud.

Consultar al médico

El sobrepeso y la obesidad conllevan un sinfín de enfermedades entre las que se incluyen colesterol alto, diabetes tipo 2, hipertensión, entre otras. Por lo cual, antes de embarazarse en la difícil tarea de bajar de peso, es preciso que un médico haga un chequeo general sobre todo antes de comenzar a practicar ejercicio. Ya que es importante saber si no existe alguna enfermedad o condición que deba tenerse en cuenta como ser problemas cardíacos, etc.

Comenzar progresivamente

Tanto para hacer una dieta como para comenzar a practicar ejercicios con regularidad, es necesario ir de a poco, progresivamente, ya que fundamentalmente de lo que se trata es de cambiar hábitos de vida y éstos no se modifican de un día para otro, lleva tiempo y esfuerzo. Pero está comprobado que esta es la manera que da más resultados, ya que puede mantenerse en el tiempo por lo cual se baja de peso y se mantiene, no se produce el famoso efecto rebote, tan común con algunas dietas, en las que se pierde mucho peso de golpe, pero se recupera rápidamente. Por ello, lo ideal es comenzar a hacer dieta progresivamente, no centrarse únicamente en bajar de peso, sino fijarse metas enfocadas a mejorar el estado general de la salud, incluyendo comer sano, equilibrado e incorporando el ejercicio físico regular a la vida diaria.

Establecer metas claras pero alcanzables

Es muy importante tener en claro factores como la herencia, hay aspectos corporales que son inmodificables tan solo con dieta y ejercicio puesto que son parte de la estructura corporal, como por ejemplo: Tener mucha cadera. Por ello, en lugar de compararse con otras personas que tienen una estructura absolutamente diferente a la nuestra y pretender alcanzar esa figura es imposible. En lugar de esto, es mejor fijarse como objetivo perder un par de tallas de jeans, poder ponerse un hermoso vestido en el que hasta hace un tiempo no se entraba, etc. Es decir establecerse objetivos comparándose con uno mismo e intentando mejorar en relación a uno y no a los demás. En este sentido, al ver que se está más ágil, que no se pierde el aliento al correr el autobús o que al comprar una prenda de ropa se tiene que pedir un talle menor, uno se siente más motivado a seguir adelante y progresar en pos de estar mejor.

Es preferible establecer pequeñas metas a corto plazo pero alcanzables, que pueden llevar a transformaciones saludables a largo plazo, que proponerse lograr grandes empresas cuasi imposibles lo que puede hacer que se abandone todo puesto que no se ven los logros porque son muy difíciles de alcanzar.

Algunas recomendaciones para fijarse pequeñas metas en relación al ejercicio físico:

  • Volver caminando del trabajo y si es demasiado lejos, bajarse unas cuantas paradas antes del autobús y caminar hasta su casa
  • Utilizar las escaleras en lugar del ascensor
  • En vez de pedirle a otro que nos alcance algo que está lejos, pararse e ir a buscarlo uno mismo
  • Escoger alguna actividad física que nos guste, actualmente hay infinidad de actividades que se imparten en los gimnasios que son muy divertidas y sirven para quemar grasa de una manera muy entretenida (ritmos como ser Reggaeton, salsa, hip hop, etc.), aerobox, Tae Bo, Spinning, entre otros. La mejor forma de comenzar a practicar con frecuencia algún tipo de ejercicio, es haciendo uno que se disfrute, no hacerlo como obligación sino por placer. De esta manera se hará ejercicio con gusto y no se buscarán excusas ridículas para no hacerlo

Algunas recomendaciones para fijarse pequeñas metas en relación a la comida:

  • Comer de guarnición ensalada en vez de puré o papas fritas
  • Si los dulces son la perdición no es necesario privarse de ellos, optar por los postres Light de bajas calorías puede ser de mucha utilidad
  • No comer no es la solución. Hay que buscar alternativas sanas, con bajas calorías y llenar el plato con este tipo de alimentos. Verduras, hidratos de carbono, granos
  • Tener siempre en casa una opción de comida sana y de bajas calorías, porque sino cuando ataca el hambre se comerá lo primero que se encuentre. Para esto es preciso ir al supermercado y comprar verduras lavadas y cortadas, prontas para condimentar y comer, que facilitan mucho las cosas sobre todo cuando se pretende comer sano